Un acabado con apariencia de oro que aporta al acero inoxidable una imagen sofisticada. Un aspecto completamente nuevo para el clásico y exclusivo acero AISI 304, gracias al innovador tratamiento físico PVD (Physical Vapor Deposition). Esto permite la deposición de metales preciosos sobre superficies de acero, dando un color exclusivo y mejorando la resistencia a los rasguños y al desgaste. El acabado se crea a través de un proceso físico que no solo le otorgan al objeto características superiores a cualquier otro tratamiento químico o electroquímico, sino que también garantiza un recubrimiento perfectamente sostenible, con impacto medioambiental reducido, hipo alergénico y 100% compatible con el uso en el campo los alimentos.